La antología Pájaro y Luna (Ediciones Matanzas, 2006) recoge una exquisita selección de los poemas en los que Digdora Alonso ha reflexionado en torno a la naturaleza, sin duda uno de sus más frecuentados temas.
Rolando Estévez, también poeta, se encargó de escoger los textos, tomando como base los libros Como ángel cierto (Unión, 1988), Casi invisible al atardecer (Matanzas, 1984), Yo, mi desconocida (Unión, 1998), Contemplaciones (Unión, 2004), Rosa de Jericó y otros poemas (Vigía, 2004), y algunas composiciones inéditas.
Según afirma Gaudencio Santana, editor de este volumen, se trata de versos “en los cuales conversa con nosotros un pájaro, una araña, un gato que recuerda el haber sido un dios”, signos elementales “que Digdora va llenando de contenido, como un deseo propio por trascender aparentes insignificancias y llegar a decirle a los seres humanos que a veces lo que menos llamativo nos resulta es esencia de la poesía”.
O, mejor, esencia de lo que es el hombre, pues la verdad es que en el fondo ella toma a la naturaleza, parte de la naturaleza para arribar al hombre, a su existencia en sentido general (a sus inquietudes, a los movimientos de su alma, de su vivir cotidiano).
Rolando Estévez, también poeta, se encargó de escoger los textos, tomando como base los libros Como ángel cierto (Unión, 1988), Casi invisible al atardecer (Matanzas, 1984), Yo, mi desconocida (Unión, 1998), Contemplaciones (Unión, 2004), Rosa de Jericó y otros poemas (Vigía, 2004), y algunas composiciones inéditas.
Según afirma Gaudencio Santana, editor de este volumen, se trata de versos “en los cuales conversa con nosotros un pájaro, una araña, un gato que recuerda el haber sido un dios”, signos elementales “que Digdora va llenando de contenido, como un deseo propio por trascender aparentes insignificancias y llegar a decirle a los seres humanos que a veces lo que menos llamativo nos resulta es esencia de la poesía”.
O, mejor, esencia de lo que es el hombre, pues la verdad es que en el fondo ella toma a la naturaleza, parte de la naturaleza para arribar al hombre, a su existencia en sentido general (a sus inquietudes, a los movimientos de su alma, de su vivir cotidiano).